Entrada no cárcere

Cárcel-y-torre (1)

“Cuando entré en la cárcel de La Coruña, me pareció un edificio enorme, inacabable. Al salir, justo frente a la puerta exterior, me volví para contemplar el hall de acceso. Me pareció, de repente, muy pequeño, como si se hubiese sumido y resumido… Después de nueve meses, aquel monstruo a punto de parirme al espacio exterior, me mostraba su vientre convertido en un bucle, mitad obsceno, mitad imaginario, incluso inofensivo en su enanismo, perdido en el espacio y en el tiempo…”

José Torregrosa

Un gorrión

Un paxaro ilumina a estadía do presos.

“Lo más interesante ha sido una cría de gorrión que cayó en el patio, a la que su madre putativa estuvo intentando sacar de allí durante tres días. Nosotros mimamos a la cría a base de pan y agua, hasta que pudo volar. Allí nos tenías a 25 tíos, sentados en el suelo, contemplando, como tontos, los revoloteos del gorrión que, por la noche, dormía en la despensa”.

Jose Torregrosa, preso no 1972

https://josetorregrosa.wordpress.com/2012/07/01/cartas-desde-mi-celda-15/

autor da foto: Faustino Rodríguez